Despertando al gigante interior. Anthony Robbins

Seis pasos para el dominio emocional

Seis pasos para el dominio emocional, cada vez que siento una emoción dolorosa, puedo dar seis pasos para romper con rapidez esas pautas limitadoras, situarme en una posición que me permita aprender la lección para el futuro y eliminar rápidamente el dolor que produce. Revisemos brevemente esos seis pasos para el dominio emocional.

Pasó uno: Identifique lo que está sintiendo realmente.- la gente se siente con frecuencia tan sobrecargada que ni siquiera sabe lo que le pasa. Lo único que sabe es que está siendo atacada por todas esas emociones y sentimientos negativos. En lugar de sentirse sobrecargado, deténgase por un momento y pregúntese ¿Qué estoy sintiendo ahora realmente? 

Paso dos: Reconozca y aprecie sus emociones, sabiendo que estas le apoyan.- agradezca el hecho de que haya una parte de su cerebro que le envía una señal de apoyo, una llamada a la acción para efectuar un cambio, ya sea en su percepción de algún aspecto de su vida o en sus acciones. 

Pasó tres: Tenga curiosidad por el mensaje que le ofrece esta emoción.- sentir curiosidad le ayuda a dominar su emoción, a solucionar el desafío y evita que el mismo problema vuelva a surgir en el futuro. ¿Qué necesita hacer ahora mismo para mejorar las cosas?

Pasó cuatro: Obtenga confianza en sí mismo.- la forma más rápida, sencilla y poderosa que conozco de manejar cualquier emoción consiste en recordar algún otro momento en que haya experimentado una emoción similar, y darse cuenta que entonces logro manejar esta emoción con éxito. Puesto que la controlo en el pasado, seguramente podrá volver a hacerlo hoy.

Pasó cinco: Asegúrese de que puede manejar esto no solo hoy, sino también en el futuro.- una forma de conseguirlo es recordar la forma en que manejo la situación en el pasado, y ensayar el manejo de situaciones similares cuando esta señal para la acción vuelva a presentarse en el futuro.

Pasó seis: Anímese y emprenda la acción.- Déjese animar por el hecho de que puede manejar esta emoción con facilidad y emprenda alguna acción inmediata para demostrarlo.

Recuerde que el mejor momento para manejar una emoción es aquel en el que empiece a sentirla. Resulta mucho más difícil interrumpir una pauta emocional una vez que esta se ha puesto en marcha. Por ello Maté al monstruo cuando todavía es pequeño”. 
   

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